Ensayo: Star Wars, Star Trek y la ideología liberal de Silicon Valley

Ensayo: Star Wars, Star Trek y la ideología liberal de Silicon Valley

Por E. V. Pita, doctor en Comunicación, licenciado en Sociología y Derecho

Link de este artículo original y actualizado en:
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El cofundador de PayPal e inversor de capital riesgo en nuevas tecnologías de la información (TIC), Peter Thiel, cuenta en su libro "De cero a uno", que su generación de jóvenes emprendedores que montaron las "start-ups" y las empresas "punto.com" de Silicon Valley en el año 2000 se parecían en algo: "Eran fans de la capitalista Star Wars y no de la comunista Star Trek".

Esta frase resume un poco cómo funciona tanto Star Wars como Silicon Valley. Por un lado, está el mismo espíritu de tecnificación que en la saga galáctica está simbolizada por la luna artificial de combate La Estrella de la Muerte y su rayo láser capaz de destruir planetas, así por sus tropas de choque, su ciborg Darth Vader, sus aerodeslizadores de las arenas y los robots R2-D2 y BB8 o el androide C3-PO. Es un mundo altamente tecnificado de computadoras, planos desplegables o mensajes en hologramas... Parte de estas cosas ya no sorprenden porque, menos el salto al hiperespacio, casi todo se ha conseguido en el mundo real desde que en 1977 se estrenó la primera película de la saga de George Lucas. Incluso las computadoras de Star Wars parecen ahora obsoletas.


En Star Wars nos encontramos dos mundos: uno rural y periférico, al que pertenecen Lucas Skywalker y los viejos jedis como Yoda o Obi-Wan Kenobi, y otro mundo opuesto y supertecnificado, el Imperio, donde la bota de su poderosa tecnología pisa a toda la Galaxia.

En el medio de estos extremos enfrentasos, sobrevive el contrabandista Han Solo, que sin interesarse para nada en la "Fuerza" solo intenta ganar dinero y sacar beneficios con su rápida nave El Halcón Milenario eludiendo los férreos controles al comercio del Imperio. La tasca de los bajos fondos de Mos Esley refleja que allí está el mundo libre donde florecen los "negocios", gente al margen de la ley. Se trata de un capitalismo que late bajo la clandestinidad y lejos de la vista del Imperio. Es un entronque directo con las ideas más liberales, en las que se cede todo el poder al individuo y se restan competencias al Estado. De hecho, algunos de los prohombres de Silicon Valley siguen los libros del ultraliberal Raymon Aron, máximo defensor de la libertad del individuo. Esa ideología ultraliberal sería la "Fuerza" de Silicon Valley.

La diferencia de Star Wars con Star Trek, es que flota del capitán Kirk y Spock navegan bajo las órdenes de la Federación Interestelar para imponer la paz y nunca comentan la posibilidad de hacer negocio o sacar pasta con sus aventuras. Pero siguen funcionando como un imperio

Si nos remontamos al mundo real, vemos que los emprendedores de Silicon Valley han convertido al mundo en algo parecido a Star Wars, al menos en lo que respecta a tres personajes de la saga: Han Solo, C3-PO  y los jedis.

Por un lado, representan imaginariamente, por un lado, al Han Solo que opera al margen de la ley del Imperio. Frente a las restricciones del Estado, los emprendedores idean nuevos modos para que los individuos sean más libres en sus comunicaciones y relaciones sociales. De ahí surgen iniciativas como Uber o AirBnb, donde desaparece el intermediario y el cliente negocia directamente con el proveedor.

Por otro lado, son el C3-PO del mundo real, los emprendedores apuestan por la automatización y la robotización de todas las cosas y empleos, con apoyo de la Inteligencia Artificial, el Big Data o Internet. A medida que pasan los años en el mundo real, hay menos trabajadores reales y más autómatas como BB8. La relación simbiótica sería la del piloto Luke Skywalker y su ayudante mecánico R2-D2.

En tercer lugar, entronca con los "jedis" en el sentido de que muchos emprendedores de Silicon Valley trabajan en técnicas de inmortalidad cibernética, una forma de conservar los recuerdos de toda la vida de una persona en un cedé o un disco duro, que seguirían almacenados incluso después de su muerte. La personalidad del difunto sería imitada por "bots" o "robots" con los que sus familiares y amigos podrían seguir hablando por Facebook. Esto recuerda al fantasma de "Yoda" o "Ben Kenobi" cuando se aparecen a su discípulo Luke para aconsejarle.